¡Valora, mejora y acepta!

¡Semana nueva, imagen nueva! Soy un ser humano como tú así es que en mis haberes tengo aciertos y tengo muchos desaciertos. No por ser psicóloga tengo la receta mágica para que este caminito que se llama vida sea mejor. Cada uno tiene que andar su propia senda e ir construyendo y poniendo dirección allí donde considere que su vida puede ser más plena. Lo que si que he aprendido en mis 43 años de vida es que hay ciertos elementos que contribuyen en gran manera a hacer tu vida más plena:

  1. Aprender a valorar lo que tienes: como ser humano te habitúas rápido a lo que tienes alrededor, tanto material como inmaterial. Incluso lo puedes llegar a percibir como «lo normal». Y eso te impide valorar y agradecer todo lo que contribuye a tú crezcas como persona y que tu vida sea como es ahora, a pesar de que puedan existir situaciones mejorables. Lo sé, quizá ahora es un momento de tu vida en que son demasiadas cosas las que no funcionan, pero ¿y las que si?. ¿Respiras todos los días? Quizá te parezca una tontería, algo que haces sin darte cuenta. Pero te has parado a pensar la cantidad de personas que viven pegadas a una máquina para poder respirar mejor? ¿Por que no tomar conciencia del valor de tantas y tantas cosas que contribuyen a que tu vida sea  como es? Con lo bueno y con lo no tan bueno …
  2. Mejora lo que puedas: ¡claro que si ! Es muy legítimo y saludable que te esfuerces en mejorar todo aquello que realmente se encuentra en tu ámbito de influencia. Y esto en ocasiones es difícil de discernir ya que sin darte cuenta te empeñas en resolver o mejorar la vida de otras personas. E igual estas no quieren, no dejan o no lo desean como tú quieres hacerlo. Así es que atina bien el tiro y focaliza tus recursos físicos, emocionales, económicos en aquello que realmente depende de ti. ¡Adelante pero igual de importante es aprender a soltar cuando ya no se puede más!. Y eso no es abandonar.
  3. Acepta lo que no tienes: confieso que la aceptación me parece maravillosa. Son tantas y tantas y tantas las cosas, situaciones de la vida que no se van a ajustar a aquello que sueñas, deseas, anhelas …son tantas las decepciones que vas a sufrir que cuanto antes aprendas a dejarlas pasar antes te reequilibraras del disgusto. Por tanto, sueño, desea, anhela pero si no se cumple suelta, no te agarres y acepta que no puede ser.

Lo sé, la teoría es fácil que la práctica pero tienes toda la vida para perfeccionarte. ¿Te atreves a intentarlo?

¡Feliz día!

Nayra

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