«Yo soy así y no puedo cambiar»…¿seguro?

¡Semana nueva, imagen nueva! Otro viernes más en que comparto contigo una mini reflexión con otra imagen diseñada para ti. En esta ocasión me he inspirado en muchas  reacciones o comentarios que recibo en consulta y donde las personas se autodefinen de una manera algo limitante «yo soy así y no puedo cambiar» o «toda la vida he sido así, a estas alturas es imposible».

Tengo la grandísima fortuna de ver a través de mi trabajo como psicóloga la capacidad de cambio del ser humano. No me canso de observarlo, admirarlo y aprender cada día de muchos de mis pacientes. Es comprensible que muchas personas, igual tú, veas inviable hacer determinados cambios. Funcionas en «piloto automático», no te cuestionas lo que piensas, ni lo que sientes, ni lo que haces … sencillamente lo repites una y otra vez, llegando en muchas ocasiones al  convencimiento que todo eso es «lo normal» . 

Tu cerebro como el mío crea conexiones neuronales a partir de la experiencia directa que mantiene con el entorno cotidiano. Establece rutas en nuestro cerebro que guían nuestros pensamientos, emociones y conductas. Estas rutas no son fijas e inflexibles. La ciencia ha demostrado que tu cerebro y el mío son moldeables, se va transformando a partir de los nuevos aprendizajes que vas adquiriendo a lo largo de la vida. Tanto si estos  son agradables como desagradables, empujándonos a un estado permanente de cambio.

Si quieres saber algo más sobre la neuroplasticidad del cerebro, te dejo un enlace muy interesante y cómodo de leer.

La parte científica indica que si podemos  modelar nuestra conducta y cambiar nuestras creencias. Pero ¿y eso como se hace? Bueno el motivo de este post no es hacer una lista larga y extensa de las técnicas con las que trabajamos los psicólogos para ayudar hacer esos cambios. Lo que si puedo adelantarte que para llevarlas a cabo vas a necesitar tres cosas … paciencia, entrenamiento y muchas perseverancia.

Llevar a cabo esos cambios de rutas neuronales en tu querido cerebro requiere de mucha repetición. Por esta razón y a pesar que te cargues de buena voluntad y te repitas con la mejor de las intenciones «si quiero, puedo», si no lo acompañas de acción diaria, la tendencia de tu cerebro será dirigir tus acciones a aquello que siempre has hecho … sigue su antiguo cauce. Durante un tiempo transitarás entre el nuevo cambio que quieres implementar y el antiguo que se resiste a irse. Se que es incómodo pero no tenemos otra manera de hacerlo, es importante conocer tu naturaleza humana y aceptar lo que eres para a partir de ahí trabajar.

Así es que a la creencia «yo soy así y no puedo cambiar», ¿verdadero o falso? … ¿ y tú que crees?

¡Feliz día!

Nayra