¡Tengo un mal día!

¿Quien no ha estado alguna vez tentado a pensar algo así como «¡¡¡ buuff, en mi vida me sale TODO mal!!!»? después de sufrir algún tipo de contratiempo, desilusión, problemas en la vida. Pero eso es así …¿seguro? Alguna vez te has cuestionado si eso que piensas es cierto o por el contrario es algo que has pensado y pensado y pensado y pensado hasta al final terminar creyéndotelo sin más? ¿Alguna vez te has hecho las siguientes

• ¿Seguro que TODO, TODO, TODO te sale mal?
• ¿No te ha salido algo bien desde que has nacido?
• Si no recuerdas nada, te invito a que preguntes a las personas que te quieren y te acompañan en la vida, quizás ellas puedan decirte algo que tú no recuerdas … o no ves.

¿Recuerdas cuando en el artículo «Tratamiento para la depresión» te contaba cuáles eran las características de los pensamientos depresivos? Una de las características es que eran muy extremos y catastróficos además de en ocasiones generalizar en exceso. Así es que ¿si piensas de forma tan extrema como crees que serán las emociones que le acompañen a ese pensamiento? ¡¡Pues  eso, también muy extremos y muy intensos, provocándote un gran malestar que además es mucho más difícil de gestionar.

No quiero que pienses que a partir de ahora tienes que pensar siempre en positivo, eso NO es posible porque además en ocasiones las circunstancias por las que pasas sencillamente son difíciles, la vida es muy difícil en ocasiones. Pero si puedes ajustar la situación desagradable que te toca vivir con un pensamiento más proporpocionado, adecuado y saludable para ti.

Si tienes una mala racha, ajusta tu pensamiento y piensa «Tengo una mala racha» o «Tengo un mal día, semana» no lo hagas extensivo a toda tu vida. Pensar que pasas por una mala racha te permite salvar todas las cosas buenas que si que has tenido hasta ahora y que porque no, quizás también en el futuro. Obviamente tienes derecho a experimentar malestar pero ajusta el malestar a la realidad ya que seguro que no es verdad que toda tu vida te haya salido todo mal, ¿verdad que no?

Tus pensamientos solo son pensamientos, nada más. Por el mero hecho de que lo pienses NO significa que sea cierto. Así es que es recomendable que de vez en cuando, cuando veas que tu malestar no se marcha y te desborda te cuestiones y preguntes ¿ tengo pruebas irrefutables de lo que estoy pensando es verdad? No funciones en «modo automático». Para y cuestiónate.