¿Qué es la ansiedad? (I)
El pasado 17 de enero compartía contigo un artículo presentando el proyecto “Tus Emociones de la A a la Z» donde te invitaba a que me acompañaras durante todo el año a descubrir la ruta de las emociones, de tus emociones. Que mejor manera de empezar que con la letra A de…ANSIEDAD. En este artículo te ayudaré a responder a preguntas del tipo ¿Qué es la ansiedad? ¿Cuáles son las funciones de la ansiedad? ¿Cómo te hace sentir, pensar o actuar la ansiedad? ¿Cuáles son los beneficios de la ansiedad? ¿Qué problemas ocasiona la ansiedad? En definitiva, la ansiedad ¿es tu amiga o tu enemiga?.
¿Te atreves a seguir leyendo?
La emoción de la ansiedad
El psicólogo americano Paul Ekman es uno de los grandes referentes en el estudio científico de las emociones del siglo XX. Inició sus estudios con el objetivo de comprobar si las emociones tenían un origen cultural. Después de múltiples viajes alrededor del planeta, Paul Ekman concluyó que el ser humano, independientemente del lugar donde haya nacido, nace con unas emociones básicas y universales como son la alegría, tristeza, ira, sorpresa, asco y el miedo.
Si tienes curiosidad, te dejo un interesantísimo artículo sobre los descubrimientos científicos de las emociones de Paul Ekman, aquí te lo dejo .
Por tanto…
La ansiedado el miedo es una emoción innata que ayuda al ser humano a responder de forma automática y eficaz, ante peligros reales bien huyendo o luchando, poniéndolo a salvo.
En la época de los dinosaurios, nuestros antepasados lograban sobrevivir y evitar infinitos peligros a los que tenían que hacer frente, gracias a la respuesta innata de la ansiedad. Ahora no nos persiguen dinosaurios pero convivimos en ciudades con otro tipo de peligros que requieren de nuestra querida ansiedad para ponernos a salvo. En conclusión, la ansiedad tiene como función lograr que respondas antes los peligros reales e inminentes que se presentan en tu día a día y sobrevivas a ellos.
¿Qué te hace pensar, sentir o hacer la ansiedad?
Como bien te comentaba en el artículo de la “Tus Emociones de la A a la Z”, cualquier conducta tiene tres niveles de respuesta, qué piensas, que sientes físicamente, que haces. Te planteo dos ejemplos bien diferentes para que puedas comprobar de qué forma puede actuar la ansiedad en tu vida.
Ejemplo 1: Situación de peligro real e inminente.
Imagina por un momento que estás por la calle y vas a cruzar un paso de peatones. Miras a ver si viene algún coche y comienzas a cruzar. De repente sin saber de dónde ha salido aparece de la nada un coche a toda velocidad que se dirige hacia ti. ¿Qué ocurre en esos instantes?:
- ¿Qué piensas?: “Madre mía, este coche me va a atropellar”.
- ¿Qué sientes?: Tu respiración es más rápida y agitada, tu corazón se acelera notando taquicardias, la musculatura de todo tu cuerpo se tensa permitiéndote poner en posición de acción (lucha o huída), además de poder sentir calor, temblores, sudor, visión borrosa, nudo en el estómago. Dependiendo del nivel de peligro que interpretes así será la intensidad de tus sensaciones físicas. Es verdad que si estas son muy intensas pueden ser muy muy desagradables pero solo son eso desagradables NUNCA peligrosas.
En un próximo artículo te contaré cómo y porque experimentas esas sensaciones, eso te ayudará a entender mejor cómo funciona tu cuerpo y en consecuencia interpretar de forma adecuada qué te está pasando.
- ¿Qué haces?: En esta ocasión la opción más adecuada es salir corriendo lo más rápido que puedas para no terminar debajo del coche. ¡Ya estás a salvo!
En conclusión, la ansiedad te ha ayudado a movilizar la energía suficiente de tu cuerpo para ponerte a salvo. En estos casos, la ansiedad es adaptativa, es decir, te ayuda a dar una respuesta ante una exigencia de tu entorno y sobrevivir. En esta ocasión tu ansiedad es tu amiga, tu aliada.
Para que te ayude a comprender o a completar la información te dejo un vídeo muy interesante. ¡Espero que te guste!
Ejemplo 2: Vas a examinarte
Ahora imagínate que tienes que examinarte esta tarde de algo que es muy importante para ti. Has estudiado durante meses, vas preparad@ pero aún así sientes cierta tensión… eso también es ansiedad aunque sea de menor intensidad. ¿Qué ocurre ahora?:
- ¿Qué piensas?: “Me juego mucho en este examen pero he estudiado así que voy a demostrarlo”.
- ¿Qué sientes?: algo de tensión muscular, algunas mariposas en el estomago, quizás la boca algo seca pero al mismo tiempo estás 100% concentrad@ en cada una de las preguntas, te fijarás en los detalles.
- ¿Qué haces?: respondes de forma eficiente a cada una de las preguntas.
En esta ocasión ese puntito de ansiedad “controlada” te ayuda a realizar el examen, te facilita la tarea. ¿Te imaginas hacer un examen igual de relajado que cuando ves una película en la TV? No, no es posible, en ese caso tu nivel de concentración no sería el óptimo para poder recuperar la información de tu memoria, estarías algo “dispers@”. Así es que en esta ocasión tu ansiedad vuelve a ser tu amiga, tu aliada.
Ejemplo 3: Situación nueva
Ahora imagina que es la primera vez que viajas sol@ al extranjero. Tienes que coger distintos medios de transporte y esta situación te genera cierta incertidumbre, no sabes con exactitud qué va a pasar… sientes cierto nivel de ansiedad. ¿Qué puede ocurrir?.
- ¿Qué piensas?: “Espero entender a la gente cuando me hable. Si pierdo el avión tendré que pensar cómo solucionarlo”.
- ¿Qué sientes?: cierta tensión muscular, algo de calor, un pequeño nudo en el estomago, los ojos bien abiertos observando todo los detalles.
- ¿Qué haces?: estar expectante ante cualquier imprevisto por si tienes que reaccionar.
¿Quién no ha experimentado alguna vez cierto nivel de ansiedad ante una situación nueva? Bien un viaje, el primer día de trabajo, salir con gente que no conoces… ese nivel de respuesta de ansiedad te ayuda a mantener cierto nivel de alerta por si tienes que responder rápidamente ante algún imprevisto. Pero ojo, solo hablo de cierto nivel natural de alerta. En esta ocasión también la ansiedad es tu amiga, tu aliada.
4 beneficios de la ansiedad
Llegados a este punto tienes muy claro que la ansiedad tiene muchos beneficios en tu vida:
- La ansiedad te ayuda a mantener lejos de un peligro real mediante una respuesta de huída o lucha. ¡Te salva la vida!.
- La ansiedad te ayuda a ser más eficiente en el plan de acción que hayas decidido. Si tienes que correr, tu ansiedad de ayudará a correr mucho, mucho muchísimo, ¡como nunca lo habrías imaginado!
- La ansiedad te ayuda a responder de forma rápida y automática antes los cambios, por tanto, te facilita la adaptación a tu entorno.
- La ansiedad te ayuda a pensar y concentrarte más y mejor.
Pero no tienes que olvidar que salvo en el caso de una situación peligro de vida o muerte donde tu ansiedad será intensa y necesaria, en el resto de las situaciones descritas, la ansiedad para que cumpla los beneficios comentados tiene que mantenerse en un nivel bajo-moderado y de corta duración, de lo contrario surgirán los problemas.
Los problemas de la ansiedad: los trastornos de ansiedad
Hoy en día no vivimos rodeados de peligros mortales como hacían nuestros antepasados. Por fortuna, y en nuestra sociedad actual, no convivimos de forma general con amenazas que pongan nuestra vida en peligro real e inmediato. Y en cambio somos una sociedad con unos elevadísimo porcentajes de personas que sufren de trastornos de ansiedad.
Hasta este momento solo has leído características positivas de la ansiedad, y en cambio, una gran mayoría habla mal de la ansiedad. ¿Qué ocurre? Pones en marcha los mismos mecanismos de supervivencia que he descrito antes pero en esta ocasión el peligro ni es real ni inminente. Una interpretación inadecuada de la valoración del peligro te lleva a responder con un nivel de ansiedad excesivo. Voy a describirlo con más detalle a través de dos ejemplos:
Ejemplo 1. Miedo a los perros.
Vas por la calle y ves a un perro con su dueño y cogido con una correa. Sea acerca con cierto ímpetu a olerte y tú de repente:
- ¿Qué piensas?: “El perro me va a morder”.
- ¿Qué sientes?: el corazón se acelera, te pones muy tens@, las manos te sudan, sientes calor en la cara.
- ¿Qué haces?: Sales corriendo, cruzas la acera a toda velocidad …
Tu respuesta de ansiedad NO es adaptativa, esto es un trastorno de ansiedad, en este ejemplo concreto es una fobia específica a los perros. Interpretas la situación como peligrosa cuando no existe tal peligro o el peligro es muy bajo. La ansiedad no es tu amiga es tu enemiga.
Ejemplo 2. Vas a examinarte.
Te tienes que examinar de algo muy importante pero en esta ocasión, a diferencia del ejemplo del apartado de arriba ocurre lo siguiente:
- ¿Qué piensas?: “No sé si podré aprobar”. “Si suspendo no tendré más oportunidades y no conseguiré mi sueño”.
- ¿Qué sientes?: el corazón te sale por la boca, te sientes muy tens@, te sudan las manos etc.
- ¿Qué haces?: intentas responder las preguntas pero no te acuerdas de todo lo que has estudiado. El no poder responder alimenta tus dudas y en consecuencia tu ansiedad sube.
En esta ocasión a diferencia del ejemplo anterior, tu interpretación de»peligro» o catástrofe en tu vida ante la posibilidad de un suspenso, a través de tus pensamientos, provoca un elevado nivel de la ansiedad que dificulta su ejecución, tanto que puede hacerte suspender aunque hayas estudiado.
Por tanto, ya sabes de forma general cuando la ansiedad puede ser un problema en tu vida. En el artículo de dentro 15 días te hablaré con más detalles de los distintos tipos de trastornos de ansiedad.
Así es que espero que al terminar el artículo tengas claro que la emoción de la ansiedad es necesaria en tu vida, sin ella hoy no estarías aquí. En el próximo artículo abordaré con más detalle hacia donde te pueden llevar los problemas continuados con la ansiedad… hacia los trastornos de ansiedad.